Imprimir esta página
Lunes, 15 Abril 2013 12:35

Astilleros piden al gobierno que no permita más barcazas chinas en hidrovía

El BID otorgó a una subsidiaria de la empresa brasileña Vale un préstamo de más de 100 millones de dólares para la construcción de embarcaciones a ser utilizadas en la Hidrovía Paraná Paraguay.

Las unidades a construir son 8 remolcadores de empuje en Turquía y 144 barcazas en la República Popular China, que serán utilizados para el transporte de mineral de hierro proveniente de Brasil a través de la Hidrovía.

Este anuncio motivó una fuerte oposición por parte de la Federación de la Industria Naval Argentina (FINA), ya planteada a fines del 2012 en ocasión de la consulta del BID al Ministerio de Economía argentino en el sentido de existir objeciones de nuestro país a su otorgamiento.

Por ahora, la solicitud de los astilleros nacionales no fue tenida en cuenta y, según empresarios locales, la falta de objeción del Gobierno argentino permite que se subsidie la mano de obra de Turquía y China, en desmedro del trabajo en la región.

Este proyecto, cuando aún era encabezado por Río Tinto S.A, había contratado las embarcaciones a un astillero argentino, que llego a entregar 16 barcazas de las 80 que preveía el contrato antes de la venta de la mina a Vale do Rio Doce S.A.

Los empresarios locales sostienen que la Argentina posee una industria preparada que requiere proyectos como el mencionado. Los astilleros locales no recibieron por parte de Hidrovías do Brasil S.A. -empresa subsidiaria de Vale do Rio Doce S.A.- de Brasil, ninguna solicitud de cotización. También existen en Paraguay y Uruguay astilleros en condiciones de construir las embarcaciones contratadas en Turquía y China.

El Sindicato Argentino de Obreros Navales, a través de su titular Cayo Ayala, manifestó su desagrado ante este hecho y dijo que "demuestra una vez más la falta de apoyo a los astilleros y mano de obra nacional".

La brasileña Vale, que mantiene un conflicto por la paralización de inversiones en la mina de Potasio en la Argentina, de acuerdo con las fuentes consultadas utilizará una empresa subsidiaria bajo bandera paraguaya para registrar las embarcaciones y utilizará una vía navegable que corre en su mayor parte por territorio argentino, para transportar el mineral de hierro de su mina de Corumba en Brasil hacia puertos argentinos y uruguayos para su transbordo a grandes buques que enviarán el producto al exterior.

Por su parte, Miguel Alvarez, secretario ejecutivo de la Cámara Santafesina de la Industria Naval (CASIN), consideró un "escándalo" el otorgamiento de un préstamo de estas características por parte de un banco regional para construir embarcaciones en Turquía y China, existiendo astilleros en la región, que están exportando embarcaciones en condiciones altamente competitivas en precio y calidad.

De acuerdo con el empresario, en sintonía con lo manifestado por la FINA, es necesario que los recursos naturales de la región deben iniciar la distribución de la renta social, en el primer eslabón de la cadena de valor, que es la construcción de los remolcadores y las barcazas que permitirán hacer ese transporte.

Alvarez consideró necesario modificar el Acuerdo de la Hidrovía Paraná Paraguay firmado por los cinco países de la Cuenca, en el sentido de prohibir la importación de embarcaciones extrazona que están en condiciones de construirse por parte de los astilleros locales, moción que la Argentina debería presentar ante el CIH (Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraná Paraguay).

Las entidades sindicales y empresarias se dirigieron por nota ante las autoridades nacionales y el BID, ante lo cual consideran una "inadmisible utilización" y desvío de los fondos para el desarrollo de la región, mediante la contratación de empresas turcas y chinas.

Información adicional